...and these superficial sighs

6/9/10

Había nacido con zapatos. Rojos, finos, de taco alto,
que fueron la desesperación de todos los que vivimos juntos
en aquel tiempo.
Y en la cara tenía varias dentaduras, y lentes celestes como
el fuego.
Al pasar, por la tarde, parecía el ángel de la devoración con
pie punzó.
Mas, en realidad, amó la luz solar. Comía guindas, llevándose
una a cada boca.
Y sentía temor y amor hacia el Maestro Tigre que llegaba
en la noche a buscar doncellas.
Y nunca la eligió.

     Marosa di Giorgio en La liebre de marzo, 1981

1 comentario:

  1. telegrama pa la guada:

    .leyendo la barrita lateral, me acabo de acordar que nunca aprendi a usar twitter jajaja

    .te respondi en mi blogsin

    .mori de la risa con tus hojitas ''menstruales'' jajaja

    .celestes como el fuego!

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